▷ Residencia Virgen De La Esperanza 《 OPINIONES 》

La Residencia Virgen de la Esperanza es un centro especializado en el cuidado y atención de personas mayores ubicado en C. Miguel de Molina, 1, 04007 Almería, España. Con una valoración media de 3.8 sobre 5, esta residencia se ha ganado la confianza de muchas familias que buscan un lugar seguro y cálido para sus seres queridos en esa etapa de la vida.

El horario de atención al público es de lunes a viernes de 9:00 a 17:00 horas, y los sábados de 10:00 a 14:00 horas. Además, siempre está disponible vía telefónica en el número +34 950 20 62 32 para atender cualquier consulta o solicitud de información adicional.

La Residencia Virgen de la Esperanza ofrece un ambiente acogedor y adaptado a las necesidades de las personas mayores, con espacios diseñados para propiciar su bienestar y comodidad. Cuentan con un equipo de profesionales altamente cualificados, dedicados a brindar cuidados personalizados y atención integral a cada residente.

En este centro, se promueve tanto la autonomía como la participación activa de los residentes en diversas actividades recreativas y terapéuticas. Además, se ofrece una alimentación equilibrada y adaptada a las necesidades nutricionales de cada individuo, supervisada por expertos en nutrición y dietética.

Las instalaciones de la residencia también están equipadas con todas las comodidades necesarias para garantizar la tranquilidad y seguridad de los residentes, incluyendo zonas verdes, espacios de descanso, y accesibilidad para personas con movilidad reducida.

Con una ubicación privilegiada en Almería, la Residencia Virgen de la Esperanza se convierte en un espacio idóneo para que los adultos mayores puedan disfrutar de una vida plena y tranquila, recibiendo el cuidado y la atención que merecen en esta etapa de su vida.

CÓMO LLEGAR AHORA
LLAMAR: +34 950 20 62 32

Dirección: C. Miguel de Molina, 1, 04007 Almería, España

Horario de Residencia Virgen de la Esperanza

VER PÁGINA WEB
LEER LAS OPINIONES

TABLA DE CONTENIDOS

Opiniones de Residencia Virgen de la Esperanza

Tras revisar las opiniones sobre la Residencia Virgen de la Esperanza, puedo afirmar que la mayoría de los visitantes han tenido una experiencia horrible en este lugar. Las críticas se centran en el trato deshumanizado y desconsiderado hacia los residentes, así como en la falta de atención y cuidado por parte del personal.

Las opiniones coinciden en que los auxiliares muestran un comportamiento sin escrúpulos, pasivo-agresivo y desinteresado. Se menciona que se pierden prendas de ropa y efectos personales, lo que denota una clara falta de atención y responsabilidad en la gestión de la residencia. Además, se hace hincapié en la falta de empatía y trato frío hacia los residentes, lo que contribuye a una atmósfera general de negligencia y desatención.

La incapacidad de la administración para abordar y resolver los problemas planteados es otro aspecto destacado en las opiniones. Los visitantes señalan la falta de acción ante las quejas presentadas, lo que genera una sensación de impotencia y abandono tanto para los residentes como para sus familiares.

En cuanto a las instalaciones, se destaca que, a pesar de ser muy buenas, no compensan la deficiente gestión y la falta de personal. Esto refuerza la idea de que la residencia no cumple con las expectativas ni con el precio que se paga por ella.

Por último, es crucial mencionar que las valoraciones negativas de la Residencia Virgen de la Esperanza, incluso por parte de profesionales del Hospital Torrecardenas, refuerzan la percepción general de que se trata de un lugar con graves deficiencias en cuanto a la calidad del cuidado y la atención que se brinda a los residentes.

Las opiniones recopiladas revelan una atmósfera de negligencia, desatención y falta de empatía en la Residencia Virgen de la Esperanza, lo cual hace que la mayoría de los visitantes no la recomienden en absoluto. Es fundamental que las autoridades competentes tomen medidas para abordar estas preocupaciones y mejorar significativamente la calidad de vida de los residentes.